Planificar tus inmersiones fotográficas te ayudará a sacar el máximo rendimiento a tus entrenamientos con la cámara. Sobre todo si quieres realizar las fotografías que tienes en mente.
Es cierto que a veces puedes conseguir buenas fotografías improvisando. Es posible que un día te sumerjas sin grandes pretensiones y consigas buenas capturas. Pero si tienes todos los factores estudiados y buceas con un buen plan, tendrás muchas más posibilidades de triunfar.
Cuando hablamos de planificar tus inmersiones fotográficas, nos referimos desde elegir las mejores inmersiones para fotografiar un sujeto en concreto, hasta la configuración adecuada de tu cámara. Tampoco podemos olvidarnos de seleccionar un buen compañero de inmersión ni de elegir el centro de buceo adecuado.
Al principio cuando te inicias en la fotografía submarina, cualquier inmersión se te antoja válida para disfrutar de tu afición. Pero a medida que va pasando el tiempo te vuelves más exigente y calculador. Y es en ese mismo momento cuando le sacas todo el partido posible a tus sesiones fotográficas.
Otro beneficio de planificar tus inmersiones fotográficas, es que conseguirás más fácilmente las fotos que tienes en tu cabeza. Si vas a lo que te puedas encontrar, es muy probable que te despistes con otros sujetos y no te centres en esa foto que te ronda por la cabeza.
Si quieres conocer algunos sencillos trucos para planificar tus sesiones fotográficas, quédate sumergido un rato con nosotros.
¡Al agua!

Contenidos
- 1 Elige el destino adecuado para planificar tus inmersiones fotográficas
- 2 Planifica tus retratos submarinos
- 3 Recopila información sobre el destino de buceo
- 4 Ten en cuenta la climatología
- 5 Elige la mejor hora del día para planificar tus inmersiones fotográficas
- 6 Haz un chequeo pre-inmersión
- 7 Asegúrate de elegir el equipo adecuado
- 8 Configura tu cámara correctamente
- 9 Dónde buscar los animales
- 10 Estudia el comportamiento de la fauna
- 11 Busca compañeros de buceo afines
- 12 Elige bien tu centro de buceo
- 13 Guías de buceo
Elige el destino adecuado para planificar tus inmersiones fotográficas
En primer lugar tendrás que buscar el lugar idóneo para planificar tus inmersiones fotográficas. Si por ejemplo quieres fotografiar caballitos de mar tendrás que asegurar el tiro. En España no es un animal que te lo encuentres en todas las inmersiones. Pero existen muchos puntos de buceo donde los guías los tienen localizados.
No es lo mismo que en el briefing te hablen de la existencia de un determinado nudibranquio a que el guía te lleve de la mano hasta su localización. A todos nos gusta buscar y encontrar bichos, pero es muy frustrante tirarte toda una inmersión sin encontrar nada y para eso están los guías. Además, a los fotógrafos nos gusta delegar la búsqueda de animales para centrarnos en la cámara.
Te aconsejamos que hables con la comunidad buceadora para encontrar ciertos animales en tu país. Muchos submarinistas pueden informarte sobre dónde es fácil encontrar nudibranquios, langostas, brótolas, bogavantes, peces luna, etc. Una vez que conozcas en qué lugares puedes descubrir a ciertos sujetos, solo tienes que buscar un centro de buceo que frecuente esa inmersión.
Puede darse el caso de que tengas una serie de fotografías en mente. Si por ejemplo quieres fotografiar una serie dedicada a una morena desde muchos ángulos diferentes, busca una inmersión donde abunde este animal. Tendrás mucha más facilidad de conseguir esas fotografías y no te despistarás con otros bichos.

Planifica tus retratos submarinos
Si tienes en mente hacer una sesión a un buceador, puedes plantearte si quieres planificar tus inmersiones fotográficas en el mar o en una piscina. En una piscina lo vas a tener todo más controlado y no vas a depender tanto de la visibilidad o la profundidad.
En el caso de querer hacer una sesión en piscina, es importante tener en cuenta como está diseñada. No es lo mismo realizar una sesión en una piscina con un fondo de baldosas que en una completamente blanca. Si por ejemplo vas hacer una sesión larga, podrías buscar una piscina climatizada para trabajar más cómodo.
Este tipo de fotografía con modelos en espacios controlados se llama fotografía Indoor. Se pueden hacer sesiones muy artísticas en una piscina. Y con un poco de atrezzo se pueden recrear retratos espectaculares, solo tienes que dejar volar la imaginación.
Recopila información sobre el destino de buceo
Seguramente si con frecuencia buceas en tu zona, más o menos ya sabes lo que te puedes encontrar. Esto lleva su tiempo y unas cuantas inmersiones. Pero al ser lugares que frecuentas, puedes volver e ir redescubriendo poco a poco toda la fauna de la inmersión.
La cosa cambia cuando te sumerges por primera vez en un lugar y no tienes ni pajolera idea de lo que te puedes encontrar. En este caso es muy recomendable planificar tus inmersiones fotográficas.
No importa si se trata de un viaje de buceo al extranjero o un destino dentro de la geografía de tu país. Lo ideal es recabar toda la información posible para conocer qué tipo de fotografía puedes hacer. Si eres consciente de los animales que alberga una determinada inmersión, podrás comunicarle al guía tus objetivos.
Si por ejemplo visitas las Islas Canarias, entre muchos otros animales podrás tener encuentros con tortugas, angelotes o rayas. Esto no quiere decir que estos animales los vayas a encontrar en todas las inmersiones. Por lo tanto es importante que te documentes un poco para saber en qué inmersiones es más posible fotografiarlos.
Infórmate sobre los hábitos de los animales que quieres fotografiar. Estudia su comportamiento, en que época encontrarlos y qué hábitats frecuentan.

Una muy buena idea es conseguir un libro de las especies que quieres encontrar o buscar información en internet. Si por ejemplo quieres fotografiar una especie concreta de un opistobranquio, es muy recomendable aprender a reconocer su alimento. Es más fácil dar con la fuente de alimento de un opistobranquio, que encontrar al diminuto bichín de apenas unos centímetros.
Otro ejemplo, en muchas anémonas es muy probable que encuentres algunas especies de gambas y cangrejos. Se trata de pequeños animales que no los ves a simple vista y pasan desapercibidos si no sabes te documentas.
Estar bien documentado sobre los hábitos de la fauna que quieres fotografiar te será de gran ayuda para encontrarlos. En muchos libros especializados, además obtendrás información sobre la época en que son más abundantes, cuando es el cortejo o a qué profundidad se encuentran.
Toda esta información te será de gran ayuda para comentarle al Divemaster lo que quieres fotografiar. Y sobre todo te servirá para planificar tus inmersiones fotográficas cuando bucees sin un guía.
Ten en cuenta la climatología
La climatología también es muy importante a la hora de planificar tus inmersiones fotográficas. Y no solo estamos hablando de si hace mal tiempo para bucear.
Muchas especies de animales solo las encuentras en determinadas épocas del año. Si por ejemplo quieres fotografiar peces luna en España, no te esperes al mes de agosto. Estos animales son más fáciles de ver en primavera, cuando la temperatura del agua no es tan alta.
Las estaciones más soleadas son las más propicias para la fotografía angular y la mejor hora al mediodía. Esta información te puede ser muy útil, sobre todo cuando prescindes de la luz artificial. En días lluviosos y nublados puedes centrarte más en fotografía macro.
Ten en cuenta las mareas, cambios grandes como la luna llena pueden producir fuertes corrientes en algunos lugares. Puedes aprovechar corrientes moderadas para la fotografía macro, buceando a contracorriente tendrás menos sedimento.
Elige la mejor hora del día para planificar tus inmersiones fotográficas
Si quieres evitar otras embarcaciones y encontrar el mar más calmado, madruga todo lo posible. En algunos países bucear al amanecer propiciará encuentros con tiburones, rayas, bancos de peces y demás fauna interesante.
Bucear de noche también tiene su atractivo. Encontrarás muchos depredadores como pulpos y morenas fuera de su guarida. El buceo nocturno también es ideal para fotografiar una gran variedad de crustáceos y anguilas.

Haz un chequeo pre-inmersión
Cuanto más minuciosos sean los preparativos pre-inmersión, menos sorpresas desagradables te llevarás. Asegúrate de tener todas las baterías cargadas, tarjetas vacías y mete el cargador en tu mochila. Revisa las tóricas y la estanqueidad de la cámara.
Según el destino piensa en qué tipo de fotos quieres realizar. Busca inspiración de otros fotógrafos y estudia cómo han hecho sus capturas.
Ármate un kit para solventar posibles incidentes. Puedes incluir pilas y baterías de repuesto, algunas teóricas, grasa para engrasar las tóricas y un pequeño estuche con las herramientas básicas. En este artículo tienes una guía sobre cómo armar un kit de buceo y fotografía.
Investiga sobre tu destino qué tipo de fauna y flora puedes encontrarte. Busca información sobre la zona que vas a visitar. Infórmate sobre la ubicación del centro, que tipo de instalaciones o embarcaciones dispone.
Asegúrate de elegir el equipo adecuado
Evita elegir una mala configuración del equipo fotográfico. utilizar un neopreno inadecuado o una mezcla de aire incorrecta.
Vamos a poner dos ejemplos de experiencias personales para que entiendas la importancia de elegir el equipo adecuado. Durante nuestra estancia en Filipinas nos fuimos a bucear a Dauin, un pueblo en la isla de Negros famoso por el Muck Dive.
En una de las inmersiones abundaba la vida macro y nosotros nos metimos al agua con todas las lentes posibles. Cuando utilizas un sistema de bayoneta y te sumerges con todos los portalentes ocupados, el manejo de la cámara se hace más difícil.
Llevábamos una lente angular, un micro angular, 2 lentes macro y un par de flashes. Con esta configuración tan aparatosa, en ocasiones nos resultaba difícil colocar los flashes y más todavía encuadrar en pequeños recovecos.
Después de esta inmersión nos dimos cuenta de que el angular no lo habíamos utilizado para nada. Y sí que hubo algunas ocasiones de retratar animales más grandes como alguna raya moteada o una tortuga. Pero no estábamos en Dauin para fotografiar este tipo de animales.
En la segunda inmersión y posteriores cambiamos radicalmente la configuración a dos lentes y un solo flash. Ahora teníamos más soltura para variar la posición del flash y podíamos encuadrar fácilmente en lugares impensables con la antigua combinación. Gracias a esta configuración conseguimos muchas más fotos y trabajamos con mucha más comodidad bajo el agua.

Elegir un neopreno adecuado evitará que se te quiten las ganas de hacer fotos por bucear en aguas frías. Si quieres fotografiar un pecio en un arenal que está a 30 metros, lo ideal es que bucees con Nitrox. A no ser que tengas cerca una pared vertical y te puedas entretener en el ascenso fotografiando otros animales.
Es muy importante elegir correctamente el equipo cuando tienes claro qué quieres fotografiar. También existen inmersiones en las que puedes fotografiar vida grande y pequeña por igual. En estos casos sí que vale la pena ir con todo el arsenal.
Una buena planificación te ayudará a elegir la mejor de las opciones para cada inmersión. Busca información sobre las inmersiones y habla con los guías.
Configura tu cámara correctamente
Ten algunos ajustes preparados antes de entrar al agua, evita perder tiempo trasteando por los menús. Elige una apertura adecuada según el tipo de fotografía. Prepara el ISO, el balance de blancos, el modo de medición y la potencia de los flashes.
A veces podemos tener la cámara mal configurada, o tener una opción activada y llevarnos una sorpresa bajo el agua. Por ejemplo realizar toda una sesión bajo el agua y haber olvidado disparar en RAW.
Dónde buscar los animales
Hay algunos lugares que pasan desapercibidos por los buceadores. Si te gusta la fotografía macro abre bien los ojos en los arrecifes para buscar gobios y nudibranquios. Fíjate en las pequeñas cuevas y en las rocas donde se camuflan algunos peces como las escorporas o cabrachos.
Observa las grietas de las paredes coralinas, con la ayuda de una linterna busca crustáceos y gambas. Revisa también las anémonas ya que muchas tienen premio.
Fíjate en los recovecos de los pecios y en la cercanía del lecho marino. También donde termina el arrecife y empieza el arenal. Este lugar suele ser frecuentado por rayas, gobios, nudibranquios y otros invertebrados.
Algunas veces salirse del itinerario de la inmersión te puede deparar sorpresas. Muchos animales como los tiburones se asustan fácilmente cuando aparecen grandes grupos de buceadores y se desplazan al extrarradio. Esta decisión suele tomarla el guía de buceo, puedes preguntarle si vale la pena.
Los muelles, zonas portuarias y construcciones sumergidas son ideales para la fotografía macro. Para planificar tus inmersiones fotográficas hay que tener cuidado e informarse de las leyes de cada país y usar el sentido común. En España por ejemplo no puedes bucear en estos lugares ya que hay mucho tráfico de barcos. Nosotros en un muelle de Filipinas, buceamos en una grúa abandonada y era increíble la gran cantidad de vida macro que había.

Estudia el comportamiento de la fauna
Cuando tengas un sujeto a tiro, primero obsérvalo sin hacer movimientos bruscos y gánate su confianza. Muchas veces al acercarte con la cámara muchos animales se esconden, estudia sus movimientos. Encuadra con cuidado y controla la respiración mientras esperas que vuelva a salir.
Recuerda que para planificar tus inmersiones fotográficas hay que ser cuidadoso con el medio y no atosigar a los animales más asustadizos.
Cuando hay muchos fotógrafos en un grupo hay que respetar los turnos de cada uno. Evita perder tiempo y cuando sea el turno de otros fotógrafos aprovecha para configurar tu cámara. De esta forma cuando te toque a ti, solo tendrás que hacer unos ajustes rápidos y no estresarás al animal.
Busca compañeros de buceo afines
Todos los buceadores tenemos nuestras inquietudes y nuestra forma personal de disfrutar de las inmersiones. Piensa en tus posibles compañeros para planificar tus inmersiones fotográficas.
A muchos buceadores técnicos les encanta la profundidad, la mezcla de gases, los pecios complicados, los cenotes o los espacios confinados. El buceador vacacional busca inmersiones tranquilas y bonitas para relajarse. Hay buceadores que les encanta hacer grandes recorridos bajo el agua y explorar al máximo.
Los fotógrafos somos de otra calaña. Siempre armados con extrañas cámaras ensambladas con largos brazos articulados repletos de lentes. Para que te vamos a engañar, somos el terror de los guías de buceo. Nuestro ritmo de inmersión es lento y queremos que los guías nos encuentren muuuchos animales.
Mezclar a buceadores muy distintos en la misma inmersión, es todo un reto para el que organiza los grupos. Una mala combinación puede dar como resultado un cóctel explosivo.
Por eso es importante rodearte de los tuyos, ya sean otros fotógrafos o modelos que disfruten posando para ti. Si eres de los nuestros, seguramente te ha tocado bucear con un grupo que no comparte tu afición y quiere completar el recorrido de la inmersión. Los fotógrafos submarinos somos capaces de quedarnos 10 minutos en el inicio de la inmersión si encontramos un sujeto interesante.
Evidentemente te tienes que amoldar al grupo y no siempre vas a poder bucear exclusivamente con fotógrafos. Pero gracias a una buena planificación puedes hacer algo al respecto.
Puedes empezar conociendo a otros fotógrafos, ya sea en foros y grupos de buceo por internet o entablando amistad en los centros de buceo. Intenta dentro de lo posible bucear siempre con ellos y te aseguramos de que disfrutarás de un perfil de buceo más idóneo.
Si vas por libre, siempre puedes socializar con otros buceadores. Únete con aquellos que van con cámaras y Gopro. Busca a buceadores que les encanta la biología. Este perfil suele tener el ojo muy bien entrenado y te será de gran ayuda. También puedes buscar a compañeros que quieran retratos y no les importe posar como modelos.
Cuando ya tengas identificados a tus posibles compinches, puedes hablar con el guía y que os junte en el mismo grupo. Si las titulaciones y experiencia son afines, al guía no le importará hacer unos pequeños cambios.

Elige bien tu centro de buceo
Los centros de buceo son como los culos, todos tenemos uno. Por eso es importante hacer una pequeña planificación y elegir los más convenientes para nuestros menesteres. Un centro que tenga un barco grande y cómodo, unos guías experimentados y unas instalaciones correctas, marcará la diferencia. Para planificar tus inmersiones fotográficas elige un buen centro en el que te sientas agusto.
Para nosotros la embarcación es muy importante. No es que seamos tiquismiquis, pero intentamos evitar pequeñas embarcaciones repletas de buceadores en las que no te puedes ni mover. En estos casos tienes que tener cuidado y proteger bien tu cámara. Un buceador que se esté equipando puede propinar un botellazo a tu equipo. Y como la inmersión esté un poco lejos, tendrás que tener cuidado con posibles pantocazos de la embarcación.
Si buceas en una barca pequeña llena de buceadores, ser precavido te ahorrará algún disgusto. En estos casos coloca tu equipo en una caja de plástico duro y colócala en el lugar más seguro. Si la embarcación está muy llena siempre puedes pedirle al patrón que la guarde en el puente.
El tema de las embarcaciones puede llegar a ser muy importante. Cuando trabajamos en Koh lanta (Tailandia) había muchos centros de buceo con diferentes embarcaciones. Básicamente había dos tipos: barcos grandes y speedboats que son embarcaciones pequeñas pero muy rápidas. Los speedboats tenían un espacio muy reducido, y cuando estaban llenos, los fotógrafos tenían que cargar su equipo en las rodillas durante todo el trayecto.
Por todo esto, cuando bucees en algún destino desconocido busca por internet qué tipo de embarcaciones tiene la compañía. Si puedes elegir, agradecerás enrolarte en barco espacioso. Se agradece tener una mesa para poder montar tu equipo, cambiar baterías o visualizar tus fotografías con una buena taza de café caliente.

Otro de los pros por lo que puedes decantarte por uno u otro centro de buceo son las instalaciones. Hay centros que piensan mucho en los fotógrafos y tienen un aula específica para nosotros. Incluso algunos disponen de espacios de desalado muy cómodos para el equipo fotográfico. También es de agradecer que tengan taquillas para poder guardar tu equipo entre las inmersiones.
Otra ventaja a la hora de elegir un centro de buceo es la ubicación. Si el local está a línea de mar, es probable que puedas realizar algunas inmersiones de infanteria. En algunas ocasiones te puede apetecer bucear a poca profundidad sin necesidad de depender de que te esperen en la embarcación. La ventaja de elegir este perfil de inmersión es que tendrás más tiempo de fondo y podrás practicar la fotografía submarina sin presiones. El tener el mar cerca también es muy cómodo para practicar la cazafotosub.
Otro de los beneficios a la hora de elegir el centro de buceo es que disponga de hospedaje. Sobre todo cuando viajas por vacaciones. Si vas a bucear de 2 a 4 veces por día, no hay nada mejor que evitar desplazamientos innecesarios desde tu hotel para disfrutar de un día de buceo.
Otro motivo para decantarte por un centro de buceo u otro es la posibilidad de bucear con Nitrox. Si tu intención es sumergirte varias veces al día, el exceso de nitrógeno residual puede dejarte cansado y limitarte en algunas inmersiones. Por suerte, hoy en día casi todos los centros ofrecen Nitrox. Pero no está de más tenerlo en cuenta a la hora de planificar tus escapadas.
Guías de buceo
En según qué destinos o inmersiones, un buen guía marcará la diferencia. Los fotógrafos somos un poco exigentes en este aspecto y queremos fotografiar lo mejorcito de cada inmersión.
También hay que ser comprensivo y entender que algunos animales no siempre van a estar en el mismo lugar. Es importante comunicarse con el guía y preguntarle qué tipo de fauna nos vamos a encontrar. Esto nos ayudará a configurar el equipo los más óptimo posible.
Un buen guía de buceo debería ser capaz de gestionar un grupo, a la vez de encontrar buenos especímenes para mostrarnos. Pero puede darse el caso que te toque uno más inexperto o que tenga mal ojo para los animales. Hablando se entiende la gente, en estos casos lo mejor es comunicarse con respeto y comprensión.

Esto ha sido todo compañero, como has podido ver con un poco de planificación todo es más sencillo. Incorporar estos pequeños hábitos no te costará mucho y a medida que los apliques seguro que notas una mejoría en tu evolución como fotógrafo.
Hoy has aprendido que dependiendo del tipo de foto, hay que elegir un destino de buceo adecuado a tus objetivos. También la importancia de conocer la climatología del lugar y elegir la mejor hora del día para tu sesiones fotográficas. Has visto que documentarse sobre los animales es muy ventajoso para encontrarlos. Y cómo puede marcar la diferencia bucear con un buen guía, unas instalaciones adecuadas y una cómoda embarcación.
Si crees que se nos ha olvidado algo o tienes alguna duda puedes dejarla en los comentarios.
Recuerda que tienes a tu disposición nuestros libros y cursos especializados en imagen submarina que te ayudarán a planificar tus sesiones fotográficas y conseguir las mejores fotos.
Salud y buen azul!
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